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«Seremos digitales o no seremos»: 10 recomendaciones para afrontar el cambio

Por 05/09/2018junio 20th, 2023Transformación Digital6 minutos de lectura

Las tecnologías aceleran la transformación digital, un proceso que ya no es opcional sino necesario para poder incrementar la productividad, la eficiencia y la competitividad de todas las empresas, hasta el punto de que “seremos digitales o no seremos”. Esta es la principal conclusión del informe Recomendaciones para la digitalización de las empresas elaborado por la Comisión de Sociedad Digital de la CEOE. En el documento, la Comisión ofrece 10 recomendaciones para ayudar en estos cambios a empresas de todos los sectores.

 

 

 

La transformación digital ya no es opcional sino necesaria

Como veremos a continuación, estas recomendaciones coinciden con el análisis que ANGED y muchos de nuestros colaboradores han expresado con anterioridad en el blog:

  1. Debe desarrollarse una estrategia y un plan individualizados, que den respuesta a los retos y a las oportunidades de cada compañía en el entorno digital, con la intensidad y horizonte temporal adecuados a casa caso, poniendo al cliente en el centro de la transformación. La CEOE apunta que la estrategia requiere introducir tecnología con visión de largo plazo, pero, sobre todo, implica reconsiderar la esencia de los negocios y procesos previos, y tener una actitud proactiva ante los cambios dentro de la organización.
  2. La alta dirección de la compañía debe ejercer el liderazgo digital apoyado, siempre que sea posible, de un equipo multidisciplinar que incluya experiencia y conocimientos comerciales, operativos y tecnológicos. El directivo debe gestionar de forma equlibrada el proceso, combinando lo técnico y lo cultural y poniendo foco tanto en el interior de la empresa como en los recursos y talentos que pueda captar del exterior. Esta visión sobre el talento es la misma que explicó aplicada al retail Félix de Iturriaga, profesor del programa de dirección del IE, en nuestro blog.
  3. Es preciso llegar a disponer de puntos de contacto digitales con clientes, empleados, proveedores y Administraciones Públicas. En particular, la CEOE incide en que la relación con el cliente debe permitir la omnicanalidad. Dado que los datos muestran que los consumidores son cada vez más digitales, las empresas de retail deben alinearse con esas preferencias. En este sentido, las empresas asociadas de ANGED se encuentran entre los líderes en omnicanalidad, según el ranking de MHE.
  4. Los procesos de negocio deben ser digitales extremo a extremo, en la medida que la naturaleza de la actividad lo permita. Es decir, el pensamiento digital se aplica a todas las actividades: desde los procesos internos y la optimización de las operaciones hasta la obtención y fidelización de los clientes.
  5. Debe estructurarse la recogida de información, tanto interna como externa, y fortalecer las capacidades para su análisis, para optimizar las relaciones con los clientes, la generación de productos y servicios y las operaciones.Para ello, las nuevos avances en Big Data e Inteligencia Artificial pueden ser claves para el retail.
  6. Se debe fomentar la innovación abierta y la colaboración con terceros, dado que en el nuevo entorno digital ya ninguna empresa es dueña de todo el ciclo de innovación. Es más competitivo hacer partícipes a un mayor número de actores, incluyendo, por supuesto, los consumidores.
  7. Se debe facilitar la disponibilidad del equipamiento y el talento necesarios para soportar la digitalización, dado que sin los medios y el equipo humano adecuados no se pueden ejecutar los procesos con la suficiente eficiencia y calidad.
  8. Es conveniente adaptar la organización hacia modelos más planos, basados en grupos multidisciplinares que tengan la visión completa de la cadena de valor. Las empresas tradicionales tienen un modelo jerárquico que busca la eficiencia en la realización de actividades concretas dentro de su cadena de valor. Este modelo es menos eficiente y ágil frente a la innovación de las empresas digitales, que tienen una estructura más plana con una visión de la innovación completa en todas sus partes, hasta alcanzar a los consumidores.
  9. Es preciso, paralelamente, evolucionar hacia una cultura digital, en la que debe fomentarse la flexibilidad, la creatividad y la agilidad. Tal y como apuntaba en nuestro blog Enrique Cortés, presidente para el instituto de liderazgo estratégico de España, algunas organizaciones aunque tengan una estrategia de transformación digital, en el fondo no están dispuestas a cambiar. La transformación digital es ante todo, una transformación cultura
  10. Se debe medir el nivel de digitalización y su evolución para poder supervisar el grado de ejecución y progreso, así como poder identificar desviaciones y corregirlas lo antes posible con las correspondientes acciones. Por ello, es recomendable la verificación independiente por terceras partes de la digitalización de la empresa, para generar confianza en los actores de toda la cadena de valor y en los consumidores.

Para continuar con la transformación digital del retail hay que avanzar hacia una mayor libertad comercial para todos los operadores

Estas 10 recomendaciones son una gran orientación para que todas las empresas, inlcuidas las del retail, puedan ser más competitivas de cara a unos consumidores que han cambiado radicalmente sus hábitos de consumo.  Tal y como señalamos en nuestra infografía sobre transformación digital, empresas y consumidores están demostrando una gran capacidad de adaptación, sin embargo, la legislación comercial sigue anclada en el S.XX, con trabas como la fragmentación del mercado, la fiscalidad discriminatoria, las barreras al crecimiento y la apertura y los horarios comerciales, como demuestra el hecho de que la Comisión Europea sitúa a España como el segundo país de la UE con mayor número de restricciones al ejercicio del comercio. Por eso, además de los pasos necesarios hacia la transformación digital dados por las empresas para responder a los consumidores del S.XXI, es necesario avanzar hacia una mayor libertad comercial para todos los operadores, independientemente de su modelo de negocio o tamaño.

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