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La Comisión Europea insiste en que las restricciones al comercio son elevadas y urge reformas en las CCAA

Por 28/02/2020junio 16th, 2023Regulación Comercial5 minutos de lectura

El último Informe sobre España 2020 de la Comisión Europea se detiene de nuevo en dos cuestiones fundamentales para la modernización del comercio: los problemas que genera la fragmentación de la unidad de mercado y la persistencia de fuertes restricciones para la actividad comercial, sobre todo, a nivel autonómico.

El Ejecutivo comunitario sugiere un mayor esfuerzo de coordinación entre Administraciones, para impulsar un entorno más favorable a la inversión, el crecimiento de las empresas y la innovación. «El carácter restrictivo y fragmentado de la regulación en España afecta negativamente al entorno empresarial e impide que las empresas aprovechen las economías de escala. Según el informe Doing Business de 2020 del Banco Mundial, España ocupaba el 30º lugar en la clasificación de 190 países en lo que respecta a la facilidad para hacer negocios», recuerda. En otros términos, un exceso de regulación tiene altos costes para la actividad de empresas e impone barreras innecesarias a su crecimiento e innovación.

Según la Comisión Europea, la fragmentación del mercado afecta especialmente a sectores como los servicios profesionales, el comercio, el transporte o la innovación. Su diagnóstico sobre este problema en España es claro:

  • «En materia de mejora de la legislación, los avances han sido escasos. Pese a algunas medidas tomadas para la aplicación de la Ley de garantía de la unidad de mercado, sería clave un mayor compromiso por parte de las comunidades autónomas y las administraciones locales para superar la fragmentación excesiva del mercado y fomentar una mejor reglamentación en España».
  • «La falta de cooperación efectiva a varios niveles y la limitada concienciación sobre sus beneficios entre los usuarios potenciales retrasan la aplicación de la Ley de garantía de la unidad de mercado. La ley se adoptó en 2013 para mejorar la normativa. Su objetivo es eliminar las restricciones al establecimiento de empresas y a la libre circulación de bienes y servicios en todo el país mediante el refuerzo de los principios de mejora de la legislación y la cooperación entre administraciones».
  • «Las conferencias sectoriales, que reúnen a representantes de los Gobiernos central y autonómicos con el fin de que discutan y definan enfoques para mejorar la normativa y superar la fragmentación en una serie de ámbitos de actuación, tienen como objetivo facilitar la aplicación de esta ley. Sin embargo, estos importantes instrumentos de cooperación están aún por aprovechar plenamente. Además, la aplicación de la ley sería más eficaz si esta fuese más conocida».
Algunas CCAA triplican en restricciones comerciales frente a otras

El informe del Semestre Europeo recalca de nuevo que las restricciones al comercio minorista en España siguen siendo elevadas: «De acuerdo con el indicador del efecto restrictivo sobre el comercio minorista, España está entre los diez Estados miembros que más restricciones imponen a la apertura de establecimientos minoristas y el segundo más restrictivo en cuanto a su explotación. Según el indicador de la regulación del mercado de productos de la OCDE, España es también más restrictiva que la mayoría de los 22 Estados miembros de la UE que también forman parte de la OCDE. La regulación de los establecimientos minoristas es competencia de las comunidades autónomas, y existen importantes diferencias entre ellas en lo que respecta al grado de restricciones a la apertura y la explotación de negocios minoristas».

Bruselas señala que el nivel de restricciones de algunas CCAA llega a triplica a otras menos restrictivas, «lo cual sugiere que puede existir margen para las reformas en una serie de comunidades autónomas«.

El proteccionismo puedo derivar en barrera al crecimiento empresarial

Precisamente, buena parte de la regulación comercial de las comunidades autónomas se desarrolló hace más de 30 años con el objetivo de proteger a determinados los operadores de menor tamaño. A día de hoy, con un mercado radicalmente distinto, dominado por la transformación digital, los profundos cambios en los hábitos de consumo y el nuevo entorno competitivo global, este planteamiento proteccionista puede ser un problema para el crecimiento de las empresas.

Como señala la Comisión Europea, las normas aplicables en función del tamaño (umbrales) pueden afectar a su crecimiento. «Es probable que el hecho de que muchas empresas no puedan crecer más allá de un determinado tamaño y beneficiarse así de economías de escala tenga que ver principalmente con características propias de la empresa relacionadas con la productividad como, por ejemplo, su capacidad de innovar y de sacar el máximo partido a su dotación de capital humano y a su gestión».

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