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El consumo privado y la inversión empujan el crecimiento del PIB hasta el 3,2%

Por 25/02/2016Blog3 minutos de lectura

La economía española cerró 2015 con un crecimiento anual del 3,2% y un avance en la creación de empleo del 3%, según datos publicados hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Durante el cuarto trimestre, el crecimiento del PIB se aceleró hasta el 3,5% interanual.

«Se puede afirmar que 2015 fue el año de consolidación de la recuperación, con un patrón de crecimiento más equilibrado, donde a pesar del dinamismo de la demanda intea, hubo una contribución menos negativa del sector exterior. Todo ello en un contexto de ausencia de tensiones inflacionistas, de corrección del desequilibrio exterior y, en menor medida, del sector público», explica la CEOE.

Por el lado de la demanda, la inversión en bienes de equipo y el consumo privado han liderado el crecimiento del PIB. Mientras que en lado de la oferta «sobresale el avance de algunas actividades de servicios, como Comercio, transporte y hostelería, Información y Telecomunicaciones y Actividades profesionales, todas ellas con un crecimiento de su VAB por encima del 4,5% interanual en el cuarto trimestre», señala la CEOE.

Desde ANGED apuntamos desde hace tiempo que la progresiva recuperación del empleo ha sido el indicador más fiable para anticipar el cambio de tendencia en el consumo y, en consecuencia, en el comercio. En 2015, la favorable evolución del paro, la moderación de los precios y la menor presión fiscal permitieron, por un lado, elevar la renta disponible de los hogares y, por otro, apuntalar la confianza del consumidor. Otro factor crucial para el comercio ha sido la evolución del turismo. Así, la actividad y el empleo del sector han crecido con mayor intensidad en comunidades turísticas y en aquellas ciudades que han favorecido la flexibilidad horaria de los comercios.

Gracia a ello, el comercio minorista creció un 3,6% anual en 2015, su mejor registro en ocho años. Esta recuperación de la actividad fue generalizada en todas las categorías de productos, en especial, los de no alimentación, que avanzaron un 4,6% anual. Por su parte los grandes formatos comerciales cierran el año con un repunte del 4,4%.

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