Las organizaciones representativas de la cadena agroalimentaria, el comercio, la distribución y hostelería trasladaron ayer al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, su agradecimiento por no haber incluido en la reforma fiscal un incremento del IVA (por la vía de reclasificación de productos) para los alimentos.
Los responsables de Cooperativas Agro-alimentarias, FIAB, PROMARCA, AECOC, ANGED, ACES, ASEDAS, CEC, FEHR y FEHRCAREM han manifestado en los últimos meses su rechazo hacia cualquier medida que implique una nueva subida del IVA, que debilite la confianza del consumidor y ponga en riesgo la recuperación de la economía.
De hecho, el momento actual brinda una oportunidad para construir un sistema fiscal estable, seguro y atractivo para la inversión empresarial. Un modelo que ensanche las bases fiscales y ataje el fraude para incrementar los ingresos de la Administración sin necesidad de penalizar el consumo.
Para los sectores del gran consumo, la nueva normativa tributaria debería impulsar el equilibrio fiscal y la eficiencia en la gestión del gasto público. Por otro lado, también sería muy conveniente reorganizar el actual sistema de tributos, deducciones y tributos estatales, autonómicos y locales, para conseguir un marco tributario sencillo que estimule el empleo, rebajando los costes y cotizaciones que pagan las empresas.